LA PUERTA ANCHA ESTA EN TODO APOGEO (Segunda Parte)

Diciembre  2023  

T.A. McMahon 

“Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan “. (Mateo 7:13-14)

Como señalamos en la Primera Parte, aquellos que han elegido entrar por la "puerta estrecha" son aquellos que han nacido de nuevo, lo cual solo puede suceder poniendo su fe en Jesucristo, quien pagó el castigo completo por su pecado. Además, "estrecha es la puerta, y angosto es el [único] camino que conduce a la vida". Esa vida, por supuesto, es vida eterna.

Sin embargo, "muchos" escogen la puerta ancha y el camino ancho "que lleva a la destrucción", que es básicamente un preludio para pasar la eternidad en el Lago de Fuego. Allí serán "atormentados día y noche por los siglos de los siglos" (Apocalipsis 20:10). También se señaló en la Primera Parte que Satanás tiene un plan de juego del Fin de los Tiempos para la destrucción de la humanidad. 

Eso también se indica en la "puerta ancha" de Mateo 7:13 y se subraya en Apocalipsis 12:12: "¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, porque sabe que le queda poco tiempo". No hay duda de que este corto período de tiempo implicará una inundación abrumadora e increíblemente diversa de las malvadas artimañas del Adversario (2 Corintios 11).

Habiendo estado, por la gracia de Dios, involucrado en la apologética bíblica durante más de cuatro décadas, puedo confirmar la enseñanza de Salomón de que no hay nada nuevo bajo el sol. Eso es especialmente cierto cuando se trata de las artimañas y engaños de Satanás. Aumentan exponencialmente por modificaciones, adaptaciones, definiciones revisadas, corrupciones y mentiras descaradas, aunque no emitan nada nuevo. 

El asesoramiento psicológico es solo uno de los cientos de ejemplos. Es la antítesis de la consejería de las Escrituras, y la principal oposición a la suficiencia de la Palabra de Dios. Incluye miles de terapias y técnicas, todas las cuales se basan en la misma mentira, ya sea que se promuevan a través de la llamada psicología cristiana o de alguna otra ciencia pseudosocial humanista. Todas son variaciones de la mentira de que "el hombre es como Dios:" la creencia de que puede arreglar sus problemas mentales, emocionales y espirituales. Así como un leopardo no puede cambiar sus manchas, tampoco el hombre puede cambiar su naturaleza pecaminosa.

Ofrecemos un libro escrito hace más de 120 años titulado “Cristianismo y Anticristianismo en Su Conflicto Final” (CASCF). El autor, Samuel Andrews, simplemente escudriñó las profecías de las Escrituras para ver si alguno de esos versículos se estaba cumpliendo cuando él vivió. El "Anticristianismo" que abundaba en su época provino principalmente de muchos filósofos como Kant, Kierkegaard, Nietzsche, Emerson, Thoreau y otros similares. Tuvieron que pasar décadas para que sus creencias se abrieran  camino a través de la sociedad, sin dejar ninguna faceta de nuestras vidas que no se viera afectada por sus delirios de auto deificación.

CASCF explica las razones de lo que estamos observando hoy y muestra claramente hacia dónde se dirige todo: la divinidad es el destino reclamado por la humanidad, y esta meta o destino se ve reforzado por las señales mentirosas y las maravillas del hombre de iniquidad, el Anticristo. Esta creencia no tendrá su mayor aceptación hasta después de que el Anticristo mismo sea revelado, lo cual tiene lugar cuando el cuerpo de Cristo es arrebatado y el Espíritu Santo deja de restringir el mal en el mundo como lo ha hecho históricamente a través de la iglesia (2 Tesalonicenses 2:7). Aunque la mentira de la divinidad ha seducido a multitudes a través de señales y prodigios mentirosos, que han tenido lugar a lo largo de miles de años, en su mayoría son lamentables solo aspirantes a lo que está por venir.

Eso va a cambiar. Mateo 24:24 declara que lo que viene será reforzado por grandes señales y prodigios. Ese no es un adjetivo que viene a la mente cuando pudimos observar la vergüenza espiritual de lo ocurrido en el aeropuerto de Toronto (rodar por el suelo y producir sonidos parecidos a los de los animales). O más recientemente, hemos visto las "señales y maravillas" de la Iglesia Bethel de Bill Johnson de Redding, California, con "Nubes de Gloria" (brillo y humo de color dorado), lecturas de Cartas del Tarot Cristianizadas, túneles de fuego "espirituales" con participantes convulsionando, temblando, cayendo y gritando, todo acreditado como una manifestación del Espíritu Santo.

Podemos ver que Satanás ha estado preparando gradualmente al mundo desde el momento en que engañó a Eva en el Jardín del Edén con respecto a su propia "deidad" potencial (Génesis 3:5). "Aun aquel cuya venida es por obra de Satanás, con todo poder, señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de injusticia en los que se pierden; porque no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Y por esto Dios les enviará un fuerte engaño, para que crean en la mentira, para que sean condenados todos los que no creyeron en la verdad, sino que se complacieron en la injusticia" (2 Tesalonicenses 2:9-12).

No tener amor por la verdad de la Palabra de Dios es el factor determinante que aleja a la humanidad de Jesús. Satanás no tiene verdad. "Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y queréis hacer los deseos de vuestro padre. Él fue homicida desde el principio, y no permaneció en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, habla de sí mismo, porque es mentiroso, y padre de mentira" (Juan 8:44). A medida que los seres humanos optan por el "camino ancho, “voluntariamente” – “no reciben el amor por la verdad" y se les hace responsable. Eligen a su padre el Diablo. Esas son solo algunas de las declaraciones más claras, incluso alarmantes, que se encuentran en la Palabra de Dios con respecto a lo que se avecina a medida que se acerca el regreso de Jesús.

Analizando una vez más la Palabra de Dios con respecto al futuro, creo que involucra buenas noticias y algunas noticias no tan buenas. La buena noticia es que el Señor regresará pronto por Su iglesia. ¡Nada podría ser mejor que estar con Él! Una de sus bendiciones adicionales es que el Señor quitará a Sus santos de la tierra antes de derramar Su ira sobre el mundo por su iniquidad. “Porque Dios no nos ha puesto para ira, sino para alcanzar la salvación por nuestro Señor Jesucristo" (1 Tesalonicenses 5:9). La noticia no tan buena es que antes del Rapto, el cuerpo de Cristo probablemente sufrirá una guerra espiritual como nunca antes en su historia.

¿Qué me hace pensar eso? ¡Las Escrituras! La respuesta de Jesús a las preguntas hechas por sus discípulos con respecto al tiempo de su regreso indica que se caracterizará por un engaño generalizado. Él dijo: "Mirad que nadie os engañe" (Mateo 24:4; Marcos: 13:5; Lucas 21:8). Incluirá falsos profetas, falsos Cristos y, de nuevo, grandes señales y prodigios. Al leer la epístola de Judas, uno tiene la sensación de que el Espíritu Santo lo hizo pasar de hablar de la gloria de nuestra salvación a una exhortación más "necesaria" con respecto a la contienda por la fe: "Amados, cuando me esforcé en escribiros acerca de la común salvación, me fue necesario escribiros,  y os exhorto a que contendáis fervientemente por la fe que una vez fue dada a los santos" (Judas 1:3).

Contender por la fe, seguramente indica una batalla espiritual que Dios permite librar a sus santos. Judas además hace hincapié en la enormidad de los pecados de la homosexualidad y el lesbianismo, señalando que Dios juzgó y destruyó a los que pervirtieron su orden natural. "Así como Sodoma y Gomorra, y las ciudades vecinas de la misma manera, entregándose a la fornicación, y yendo en pos de carne extraña, son puestas por ejemplo, padeciendo el castigo del fuego eterno" (Judas 1:7).

¿Está la iglesia de hoy lidiando con estos asuntos? Parece estar más en línea con la actitud de "no me concierne eso realmente”, de la iglesia de Laodicea en Apocalipsis 3:15-18: " Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas”.

¿A qué está cegada la iglesia de Laodicea? ¿No se da cuenta de las consecuencias de "sufrir la venganza del fuego eterno", ya que es para siempre? A pesar de la depravación total del pecado de la homosexualidad, la idea de las consecuencias eternas ya no parece una preocupación primordial para la iglesia. Rara vez la evangelización de hoy va más allá de las bendiciones temporales que se promueven para atraer a alguno a Jesús (lo que en realidad conduce a alejarse del primer amor, el verdadero amor de los creyentes por Jesús) [Apocalipsis 2:4].

Tratemos de resumir lo que se ha presentado anteriormente, poniéndolo en un marco escatológico. Las Escrituras dejan claro que los días en los que estamos viviendo son de apostasía, subrayando la infiltración de apóstatas que entran en la iglesia (Hechos 20:29-31; Judas: 1:4). Además, vemos a una gran cantidad de líderes influyentes de la iglesia, siendo seducidos por las herejías comprometedoras de la apostasía. Abundan los ejemplos, como los muchos pastores evangélicos que están alimentando a las ovejas de Dios con el pasto producido por los mormones conocido como el programa de televisión llamado “Los Escogidos”.

Esto está ocurriendo ahora, antes del Rapto y la Segunda Venida de nuestro Señor y Salvador. Además, antes del Rapto, los verdaderos creyentes en el Señor enfrentarán un tsunami de engaños y herejías a medida que Satanás derrame su maldad sobre la tierra, sabiendo que su tiempo está cerca de su fin (Apocalipsis 12:12). En el Rapto, la iglesia será removida de la tierra, seguida por Dios derramando Su ira entre aquellos que practican y se glorían en la maldad. Diversos grados de tribulación tendrán lugar hasta que nuestro Señor regrese del cielo con Sus santos para destruir al Anticristo.

Una vez más, habrá una batalla espiritual histórica que los creyentes no han experimentado hasta ahora, sin embargo, ellos (aquellos que tienen amor por la verdad) serán más que capaces por el poder del Espíritu Santo de ser fructíferos y victoriosos. Aun así, hay Cristianos profesantes que toman la posición de que la condición prevaleciente de la iglesia en los últimos tiempos será una de avivamiento mundial. A eso añaden que los Cristianos deben gobernar sobre el mundo para que Jesús regrese y establezca su reinado milenario en la tierra. Esa es una de las principales doctrinas falsas de la Reforma Nueva Apostólica, de la Iglesia Bethel y del Colegio de Redding, California, “Los Enviados” (“The Send”) que fue una conferencia de 50,000 jóvenes, y de muchas otras, especialmente entre los hipercarismáticos. Sin embargo, esa enseñanza no tiene ningún apoyo bíblico.

Me contaron de un pastor que explicó su posición escatológica a su comunidad de esta manera: "Soy pre-tribulación... ¡Pero no soy pre-problema!" En otras palabras, el propósito del Rapto para él no es una doctrina de "escapar de los problemas". Estoy de acuerdo con su posición. Evitar los asuntos problemáticos no hace nada para fortalecer al creyente en la fe. Más bien, es por eso que el Cristianismo se encuentra en un estado seriamente debilitado en nuestros días. Una vez más, hasta que el Señor regrese por Su iglesia, Satanás galvanizará a sus seguidores que han entrado por la "puerta ancha". Aparentemente, ese es el siguiente nivel de guerra espiritual que ya está sobre nosotros. Aun así, la gracia de Dios nos cubrirá. "Que os conceda, según las riquezas de su gloria, que seáis fortalecidos con poder por su Espíritu en el hombre interior..." (Efesios 3:16). Mejor aún, se nos dice: "Bienaventurados los siervos a quienes el señor, cuando venga, halle velando; de cierto os digo que se ceñirá y los hará sentar a la mesa, y saldrá y les servirá" (Lucas 12:37). Por lo tanto, debemos velar y esperar a nuestro Salvador, quien nos fortalecerá y "dirigirá [nuestros] corazones al amor de Dios..." (2 Tesalonicenses 3:5).

Todo eso nos lleva a lo que el Señor ha puesto en nuestros corazones, aquí en “El Llamamiento Bereano”, con respecto a cómo debemos continuar ministrando mientras esperamos Su regreso del cielo. Es un enfoque más simplificado del discernimiento a medida que ministramos a aquellos que dicen ser Cristianos. Por un lado, nosotros en esta publicación (El Llamamiento Bereano) tenemos archivos que se remontan a 40 años atrás, que incluyen una gran cantidad de publicaciones apologéticas que cubren casi todas las doctrinas y prácticas falsas notables que el Adversario ha utilizado para hechizar tanto a la iglesia profesante como a la confesante en las últimas dos generaciones. Si el Señor permite, nuestros archivos estarán disponibles a medida que Él los haga accesibles. La investigación de los archivos de apologética, especialmente la profundización en los errores doctrinales, no es popular hoy en día. Sin embargo, nuestros archivos están disponibles como un recurso.

Sin embargo, nuestro enfoque más simplificado tiene que ver con simplemente establecer si la persona a la que nos referimos se considera o no un Cristiano Bíblico. La respuesta a esa pregunta es fundamental para reconocer con qué autoridad el que está respondiendo a la pregunta está basando su respuesta. Si el lector afirma ser un Cristiano Bíblico, su respuesta debe estar respaldada por las Escrituras. Todas las preguntas que se hagan deben poder responderse claramente citando un capítulo y versículo específico de la Biblia.

Por ejemplo, digamos que estamos hablando con una persona que piensa que los Católicos creen en el mismo Jesús que uno mismo. Uno debería preguntarle a esa persona si es Cristiano Bíblico. Si la respuesta es afirmativa, la próxima pregunta debería ser ¿Es el Jesús que se enseña en el Catolicismo Romano, el Jesús de la Biblia?" Si la respuesta es nuevamente afirmativa (o lo que la persona cree), entonces el interrogador debe dar un versículo bíblico definitivo que deja claro que el Jesús que adoran los católicos no es el Jesús bíblico. Por ejemplo, las Escrituras declaran que Jesús fue sacrificado una vez: "Por cuya voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo una vez para siempre". Considerando "El cual no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer sacrificios, primero por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una sola vez, cuando se ofreció a sí mismo" (Hebreos 10:10; 7:27). Otra pregunta podría ser: "¿Es el Jesús que se sacrifica continuamente en los altares Católicos de todo el mundo, el mismo que el Jesús bíblico de las Escrituras?"

Un objetivo de este enfoque apologético simplificado es desafiar las presuposiciones de una persona, especialmente si afirman ser Cristianos Bíblicos. También tiene la intención de estimular la conversación que se centra en la autoridad de la Palabra de Dios. Pocas personas se dan cuenta de que la mayoría de los que se llaman a sí mismos cristianos, no son Cristianos Bíblicos. Por nombrar algunos, los seguidores de la Ciencia Cristiana o de la “Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días” no son Cristianos Bíblicos. La Iglesia Católica Romana tiene 1,378 millones de miembros, sin embargo, tiene un evangelio que no es bíblico y una miríada de dogmas, y eso es solo la punta de un témpano de hielo de los falsos cristianismos. 

Los participantes de "puerta ancha/camino ancho" con sus falsas creencias y prácticas, son tan numerosos que prácticamente están más allá de poder cubrir cada error con una apologética bíblica integral. Esto se está haciendo cada vez más evidente en un momento en el que la iglesia parece tener poco tiempo o interés en continuar la "sana doctrina" (2 Timoteo 4:3-4). Menos aún parecen preocuparse por discernir los errores bíblicos, ya sean del calvinismo o del hiper-dispensacionalismo o de la psicología cristiana o de alguna otra falsa enseñanza inducida por el hombre.

De acuerdo a la Palabra de Dios, cuanto más nos acerquemos al regreso de Jesús por Su iglesia, más demandante será la vida espiritual en la tierra. Por otro lado, el asalto de Satanás a la iglesia se expandirá y se intensificará grandemente, aunque nada de su maldad será nuevo. Como se ha señalado, todo se revisa, se ajusta, se modifica y se actualiza para cada nueva generación.

La tercera parte de esta serie incluirá numerosos ejemplos de preguntas que desafían las presuposiciones de aquellos que profesan ser Cristianos Bíblicos.

[Continuará]