RECURRIENDO A LAS FÁBULAS SEGUNDA PARTE | thebereancall.org

TBC Staff

La base bíblica para este artículo de dos partes es 2 Timoteo 4:3-4: "Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas”.

En esta parte, el enfoque estará en una causa significativa que está alejando al cristianismo de la “sana doctrina, alejándose de la verdad" y "convertida en fábulas". Eso se llama misticismo.

Como señalamos, el misticismo es el oscurecimiento de la doctrina bíblica. Es un proceso de tomar la verdad de la Palabra de Dios y distorsionarla de tal manera que se vuelve desprovista de razón, lógica y de sentido común. Es un proceso completamente subjetivo, que rechaza la verdad objetiva presentada en las Escrituras.

Noah Webster, en su diccionario de 1828, define la doctrina de los místicos como "una secta religiosa que profesa tener una relación directa con el Espíritu de Dios". La comunicación, sin embargo, es con los demonios, todos los cuales rechazan la verdad de Dios. Sin embargo, es bueno para nosotros como creyentes que se nos recuerde continuamente lo que implica la verdad de Dios. Hebreos 2:1 nos advierte: “Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos”.  

Salmo 119:160 nos dice: "La suma de tu palabra es verdad, y eterno es todo juicio de tu justicia”.

"Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan 8:31-32). Jesús oró al Padre por los creyentes: "Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad” (Juan 17:17). Él está pidiendo que los creyentes en Él sean apartados por la verdad, que es Su Palabra.

Lo que está siendo establecido por estos versículos y muchos, muchos más que podrían ser dados es esto: la Palabra de Dios es verdad. Es la verdad absoluta. Todas las cosas que son coherentes.   con la Palabra de Dios son verdaderas. Cualquier cosa que sea contradictoria con la Palabra de Dios es falsa. Es mentira. La Palabra de Dios es inequívocamente, la Palabra de Dios. Es Su revelación a la humanidad. La humanidad no tuvo parte en esa revelación aparte de lo que los profetas de Dios recibieron de Él y posteriormente escribieron. Eso es todo. Simplemente transcribieron lo que el Espíritu Santo les dio.

Es todo de Dios. Todo es verdad objetiva dada a través de las Escrituras. ¿Por qué es crítico que los creyentes lo entiendan? Es la base para discernir la verdad del error. Un creyente sólo necesita escudriñar las Escrituras para saber si una enseñanza es verdadera o no. Se nos dice que examinemos la Palabra de Dios (Hechos 17:11), y si lo que están presentando los maestros con respecto a una doctrina o práctica no está de acuerdo con las Escrituras, "... es porque no hay luz en ellos" (Isaías 8:20). Son falsos maestros y sus palabras no son verdaderas.

Entonces, ¿cómo Satanás, el padre de las mentiras, hace que sus mentiras sean aceptables? Ahí es donde entra el misticismo. Recuerde, el misticismo es el proceso de crear confusión doctrinal al presentar enseñanzas que no tienen una base razonable, racional, lógica o de sentido común. Ese parecería ser el final del plan del Adversario para engañar a la humanidad. Pero no lo es. Es simplemente un cambio en la estrategia que utilizó para seducir a Eva. Comenzó con Satanás cuestionando la Palabra de Dios delante de ella: "¿Ha dicho Dios?" Satanás siguió declarando que ella "ciertamente no moriría". Bueno, ella comió del fruto, ¡e inmediatamente murió espiritualmente! La actitud mental positiva de Satanás hacia Eva, como con todas sus mentiras, no tiene posibilidad de hacerse realidad. Ahí es donde entra en juego el misticismo.

El misticismo crea un ambiente que es puramente mental. Es la materia de la imaginación que no tiene base en la realidad. Sin embargo, se vende con la idea de que no solamente se puede convertir en realidad sino que también se puede lograr. Sus mentiras nunca se han cumplido y nunca se cumplirán. Siendo ese el caso, tiene que atraer a la gente al mundo de la imaginación, un mundo de fantasía, un mundo que no puede ser desafiado sobre la base de la razón o la verdad objetiva. Es un mundo que es completamente subjetivo. Es impulsado por las emociones, el estado de la mente, las actitudes, los estados de ánimo, los sentimientos, etc.

Ese es el mundo, pero también lo encontramos haciendo incursiones en la iglesia. Las preguntas que se hacen en muchas clases de escuela dominical con demasiada frecuencia están en la línea de "¿Cómo te 'sientes' acerca de este versículo o aquel versículo?" Obviamente, los sentimientos no pueden decidir lo que es verdadero o falso. Son simplemente la forma en que una persona se siente, independientemente de la evidencia a lo contrario. Ese es el escenario perfecto para lo que la Biblia llama "poder engañoso", que Dios enviará sobre aquellos "que no creyeron a la verdad" (2 Tesalonicenses 2: 11-12).

Permítanme darles lo que creo que son ejemplos de un poder engañoso. Todo pecado es delirante, alucinador hasta cierto punto, sin embargo, algunas cosas son exageradas. La mentira de la divinidad hacia los seres creados puede tomarse como ejemplo. Como se señaló en la Primera Parte de estos dos artículos, Lucifer, estando en el cielo, se aventuró al tratar de alcanzar un poder que no le pertenecía (Isaías 14:14). Eva fue engañada al pensar que ella también podría "llegar a ser como Dios". Sin embargo, sin tener ni siquiera una mínima razón para que eso pudiera ser cierto, fueron seducidos por un fuerte poder engañoso. ¿Qué tan fuerte?

Esa es la mentira que se está vendiendo en todo el mundo, y que estará en el corazón de la religión y en el reino del Anticristo (2 Tesalonicenses 2: 4). La teoría de la Evolución ciertamente califica. No hay nada acerca de la Evolución que sea verdad. Nada. Sin embargo, se ha convencido al mundo y a muchos en el mundo del Cristianismo de su supuesta realidad.

La psicología es también otro ejemplo, específicamente la psicoterapia. También ha convencido al mundo y a gran parte de la iglesia de sus supuestas afirmaciones beneficiosas con base científica, todas las cuales son falsas. Aquellos que recurren a la llamada psicología cristiana, con sus implicaciones espirituales, solo agravan el engaño.

Avanzando desenfrenadamente en el mundo del cristianismo, hay programas delirantes relacionados que no tienen base en las Escrituras (o tampoco en la realidad), como el Movimiento de Espiritualidad Contemplativa, los mitos que se atribuyen a los Padres Católicos del Desierto, la promoción del Anagrama (que es un sistema que describe los diferentes tipos de personalidad), el Gnosticismo en la iglesia primitiva y las herejías actuales del movimiento llamado Palabra/Fe de hoy en día.

La espiritualidad contemplativa ha seducido a muchos de los líderes evangélicos altamente influyentes de nuestros días, como Richard Foster, Rick y Kay Warren, Chuck Swindoll y Beth Moore, por nombrar solo algunos, volviéndolos a la meditación oriental. Esa tentadora mentira afirma que subyugando la mente les permitirá escuchar directamente de Dios, logrando así una relación íntima con Jesús. Muchos afirman que centrarse en la "sana doctrina" ha entibiado o ha enfriado su relación personal con el Señor, que es nada menos el cumplimiento de la profecía de 2 Timoteo 4: 3: "Porque vendrá el tiempo en que no sufrirán la sana doctrina".

Hay una gran cantidad de otros elementos que conforman los dispositivos de Satanás en nuestro tiempo de este fuerte poder engañoso y creciente apostasía, pero quiero concentrarme en cuál es el poder más engañoso y más popular que afecta al Cristianismo en nuestros días, y explicar por qué es así. Segunda de Timoteo 4:4 declara: "Y apartarán de la verdad el oído y se volverán a fábulas”. Algunas traducciones de la Biblia usan la palabra mitos en lugar de fábulas. Ambas palabras se definen como historias inventadas, ficción, fabricaciones, historias no basadas en la verdad.

Antes de convertirme en un Cristiano bíblico nacido de nuevo, yo era un creador de mitos y fábulas. Apliqué ese oficio como guionista en Hollywood. El trabajo implicaba inventar historias originales o historias basadas en libros o vidas de personas o eventos históricos. Todas las películas teatrales son inventadas, aunque algunas se promocionan como basadas en hechos reales. "Basado en" es una frase que significa cómo Hollywood interpreta la historia.  

Mi función principal como guionista era manipular las emociones de las audiencias que iban al cine: hacerlos reír, hacerlos llorar, asustarlos, estimular sus deseos, hacerlos gritar por venganza o ponerlos en un estado de euforia. Si algo de eso no estuviera ocurriendo o si el entretenimiento no era efectivo en las películas que escribía, habría una consecuencia desastrosa en los retornos de la taquilla. Este resultado también tendría como consecuencia en tener mucha dificultad para poder conseguir mi próxima asignación en mi trabajo como escritor.

Entonces, hemos visto que controlar las emociones de una audiencia es la función principal de las películas. Eso es lo que los convierte en el medio más seductor e influyente del mundo de hoy. Y el líder en ese ámbito de influencia religiosa es la serie de películas llamada “Los Escogidos” (The Chosen). Califica completamente en todos los aspectos como un ejemplo de ilusión fuerte. Además, ha convertido millones (no Cristianos, Cristianos profesantes y muchos Cristianos verdaderos) a "fábulas." Todos sus episodios están compuestos por una compañía de producción Mormona, así como por sus guionistas, directores y actores contratados que contribuyen a las historias.

Como película, es un medio impulsado por el control de las emociones y no tiene como base la verdad bíblica. La mayoría de las entrevistas de aquellos que anticiparon el exitoso debut de “Los Escogidos”, en los cines, hablaron con entusiasmo de cuán emocionalmente afectados, incluso abrumados, estaban en la proyección. ¿Por qué sería eso cuando todos los personajes que aparecen en la pantalla son representaciones falsas de los que se encuentran en la Biblia, y lo que es más importante, un falso Jesucristo? Obviamente, estaban cegados a ese hecho ya sea por sus emociones o por sus sentimientos.

Cualquier intento de representar a Jesús con un actor es un acto de blasfemia. Aunque la blasfemia es considerada por la mayoría de las personas como palabras despectivas o irreverentes contra Dios, el significado principal de la blasfemia es caracterizarlo de manera que no es fiel a lo que realmente es. Eso ocurre cada vez que un actor trata de representar a Jesús.

Para aquellos que no ven el problema de que alguien represente al Señor, les pediría que por favor reevalúen su punto de vista del Jesús bíblico. ¿Es Él el que las Escrituras nos dicen que Dios se manifiesta en la carne? ¿No es Él la imagen del Dios invisible? ¿Es usted consciente de que "en Él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad" (1 Timoteo 3:16; Colosenses 1:15; Colosenses 2:9)? ¿Son esos atributos de la Deidad alcanzables para el hombre pecador? ¿Pueden ser reproducidos en una película?

¿Cuál es su respuesta? Eso es crítico, porque influye su relación con Jesús al igual que alguien que representa o finge ser su cónyuge, afectaría negativamente su relación personal.

Como he tenido numerosas oportunidades de compartir mi perspectiva sobre “Los Elegidos” en artículos, conferencias, charlas privadas, la respuesta más común que he recibido es así: "Bueno... Escucho lo que dice, pero usted me va disculpar, yo no opino de esa manera”. Por un lado, estoy continuamente afligido por esa respuesta. Por otro lado, confirma el abandono de la sana doctrina y el cambio a las fábulas, fábulas como se profetizó en 2 Timoteo 4: 3-4. Recuerde, el misticismo es una mentira que no tiene base en la realidad. Es una construcción de la imaginación que es promovida por los demonios. Es por eso que “Los Elegidos” es el mejor ejemplo.  

Sin embargo, el problema es aún más profundo cuando uno se sumerge en el pozo de ilusión de “Los Escogidos”. La serie es producida por un culto: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (SUD). No hay nada acerca de la religión Mormona que sea verdad. Nada. Cuando las Escrituras declaran que los hombres recurrirán a mitos o fábulas, el Mormonismo es el que personifica eso. Aunque el Libro de Mormón afirma ser el "libro más correcto de cualquier libro en la tierra y la piedra angular" de la religión de los Santos de los Últimos Días, todo es una ficción total. Es contradictorio a la verdad en todas sus declaraciones. Ha sido completamente refutado por la arqueología, por la lingüística, por la geografía, y su afirmación de que los indígenas de América del Norte y Central son todos descendientes de los judíos, ha sido completamente desacreditada por la ciencia del ADN.

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es la primera religión contemporánea que enseña claramente la mentira que la Serpiente le ofreció a Eva: que los humanos podían llegar a ser dioses. Su profeta y quinto presidente Mormón, Lorenzo Snow, afirmó que el Espíritu Santo le dio una revelación: "Como el hombre es ahora, Dios una vez fue. Como Dios es ahora, el hombre puede ser". El Libro de Mormón, su "libro más correcto", es un completo fraude conjurado por José Smith en la década de 1830. Sin embargo, ha seducido a millones de Santos de los Últimos Días a pesar de que lo que creen nunca sucedió. Y el engaño no es sólo engañar a los Mormones.

Esta decepción ha atrapado a muchos de aquellos que uno pensaría que tendrían discernimiento bíblico y especialmente aquellos que tienen la responsabilidad como pastores de proteger a sus ovejas. Trágicamente, muchos de ellos son pastores de Calvary Chapel. Aunque Greg Laurie ahora tiene su propio ministerio llamado Harvest, comenzó en el ministerio con Chuck Smith.  Laurie hizo una entrevista recientemente con Jonathan Roumie, el actor que interpretó a "Jesucristo" en “Los Escogidos”. Roumie, por cierto, también es un evangelista de la Iglesia Católica Romana. Llevó al escritor / director de “Los Escogidos”, Dallas Jenkins, un evangélico profeso, a Roma para reunirse con el Papa, quien aplaudió esta serie de películas.  

Laurie declaró en la entrevista (disponible en el propio canal de “YouTube” de Harvest) que "Dios había puesto [a Roumie] en un lugar muy estratégico" al interpretar el personaje de "Jesús." Luego declaró: "Creo que esta serie es fantástica". Una vez más, solo estoy citando lo que dijo, así que no piensen que lo estoy "atacando". En sus propias palabras está declarando lo que claramente cree. Laurie continuó: "Los actores están haciendo un trabajo increíble al dar vida a las historias bíblicas para toda una nueva generación". No, no son historias bíblicas según el guionista Jenkins, sino más bien lo que él llama "historias de fondo". Todo proviene de las mentes y la imaginación de los guionistas de los diversos episodios, así como de los aportes de los productores Mormones.

Segunda de Tesalonicenses capítulo dos, versículos 10-11 nos dice: "y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira”.

Estoy seguro de que la mayoría de nosotros tenemos la sensación de que el mundo está en un estado de engaño... un fuerte poder engañoso. Es un día de completa irracionalidad. Tenemos que explicar a nuestros niños de jardín de infantes, el por qué algunos de los niños de su clase reciben nombres de niñas. Por otra parte, uno también debe explicar por qué aquellos que no se adhieren al cristianismo bíblico, son los culpables de destruir a la "Madre Tierra". Tampoco es el asesinato de bebés a través del aborto la solución a un mundo que se les dice que está superpoblado. Sin embargo, a los niños del mundo se les está forzando esa mentira continuamente. El mundo es un desastre y no tiene solución, es decir, ninguna solución que se ajuste a la realidad. Por lo tanto, Satanás debe proponer una solución que pase por alto la realidad. Y lo ha hecho.

¡¿Misticismo al rescate?!

En su nivel más popular, el misticismo se vende a través de las películas. Ese es el vehículo ideal. Recuerde, las películas tienen que ver con la manipulación de las emociones. No solo eso, sino que tomando prestado un versículo de las Escrituras, "y nada les hará desistir ahora de lo que han pensado hacer” (Génesis 11: 6), yo agregaría, "especialmente en la pantalla grande". Es un lienzo que parece no tener limitaciones, aunque lo que se crea y presenta no es real. Y, sin embargo, ha generado una serie de creencias que son abrumadoramente seductoras. Se nos dice que nuestras mentes pueden crear ambientes o universos más allá del universo físico en el que vivimos. Es un lugar donde tenemos el control completo, donde podemos tener lo que imaginamos, y donde los problemas que enfrentamos en el mundo real no existen.

El atractivo para los jóvenes (lo que no debería ser una sorpresa) llega a lo máximo. Es como un viaje de drogas, que, por cierto, es un camino y un facilitador de esta ilusión que altera la mente. Las Escrituras se refieren al uso de drogas como brujería (pharmakeia en griego, que es de donde obtenemos nuestro término "farmacia") e indica que el uso de drogas prevalecerá en los últimos días. ¡Es claramente evidente que ya estamos allí! Todo esto es lo que enfrentaremos en los años venideros a menos que nuestra bendita esperanza, "la gloriosa aparición de nuestro Señor Jesucristo", intervenga y nos lleve a casa colectivamente.

Entonces, ¿cómo lidiamos con eso hasta entonces? ¿Cómo nos mantenemos firmes? ¿Cómo podemos ser fructíferos en una época de engaño e iniquidad sin precedentes? Efesios capítulo 6, comenzando con los versículos 10 al 18 nos lo explica.

“Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos”.

Estoy seguro de que la mayoría de nosotros hemos leído esos versículos muchas veces. Pero me pregunto qué tan en serio los tomamos. Establecen todo lo que necesitamos hacer “para que podáis resistir en el día malo”, para “que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno”, para usar eficazmente "la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios”.  Y, por supuesto, todo necesita ser sostenido con "orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos”.

Esa es la única esperanza para aquellos que conocen al Señor, y para aquellos que buscarán a Jesús y llegarán a conocerlo.

Aun así, ¡ven, Señor Jesús!

TBC